Nuestro sagrado femenino está a flor de piel. Se puede sentir el resurgir del poder de las mujeres que durante años estuvo reprimido. Es una época de cambios fundamentales que se evidencian alrededor del mundo.
El origen
En los albores de la humanidad, el Sagrado Femenino fue nuestra única referencia.
La Divinidad femenina acompañó la vida, participó de los rituales de consagración de la Vida, acompañó a las mujeres en su maduración, ayudando a la reproducción, dándole a las mujeres el poder de esta vida sagrada, que reposaba en ellas.
Sin embargo, con el tiempo, los hombres que estaban muy en segundo plano se dieron cuenta de que sin el acto sexual no había procreación.
Fue en este preciso momento en el que la Diosa debió perder terreno inexorablemente. Los hombres le agregaron un dios masculino, que continuó creciendo en importancia, relegando gradualmente a la Diosa Madre a un papel secundario.
Ella se desvaneció, dio un paso atrás y, sin embargo, nunca dejó de trabajar para todos nosotros. Ella se ha encarnado en diferentes momentos de la historia, con el fin de asentar paulatinamente su regreso a su amada humanidad.
Resurgimiento del Sagrado Femenino
Quien se va a asentar en su Sagrado Femenino, permitirá la apertura de su Corazón.
Permitirá que el alma se conecte con otras partes esenciales del ser humano. Su cuerpo, su corazón y su alma, finalmente unidos, para una acción, una vida en sinfonía.
Al mismo tiempo, el Sagrado Masculino también ocupará gradualmente su lugar. Permitir la acción, en la energía del corazón, permitir que se sienta compasión.
Al incorporar estos dos principios sagrados, han proporcionado el ímpetu para el cambio que está surgiendo.
Nos encontramos en una encrucijada. Somos extremadamente afortunados de poder experimentar esta Sagrada Re-Unión.
Abolir nuestros miedos
Mi Sagrado Femenino es la parte ligada a la Madre, es creación, inspiración, sensibilidad… Todo lo que está ligado, ligado al ritmo de la Vida, pero también de la Naturaleza que nos rodea.
Encontramos en esta polaridad, toda inteligencia emocional, intuición, compasión. Es la Luz que está dentro de nuestro corazón y que por su naturaleza irradia a su alrededor.
Mi Sagrado Masculino está ligado al Padre, es acción, pero en la serenidad, en la reflexión y también en el corazón.
Es nuestro sentido de la justicia, de la toma de decisiones reflexiva y respetuosa de lo que la rodea.
En materia psicológica, el Sagrado Femenino está vinculado al cerebro derecho, mientras que el Sagrado Masculino estará vinculado al cerebro izquierdo.
Recuperar las dos polaridades nos permitirá pasar de una a la otra, sin problemas, con respeto por uno mismo y por los demás.
Así es como podremos ver una amplificación de nuestras capacidades cerebrales. La descompartimentalización desarrolla nuestras capacidades de memoria.
Equilibrar los dos nos permite realizarnos a nosotros mismos, poder actuar en la inteligencia del corazón aceptando dejarnos guiar por nuestros sentimientos.
Nuestra historia…
Al permitir que poco a poco se reequilibre lo Sagrado Masculino y lo Femenino, tenemos que enfrentarnos a siglos de condicionamientos profundamente arraigados en nuestras cadenas de ADN.
Por tanto, este reequilibrio implica un desacondicionamiento. Limpiando nuestros recuerdos limitantes.
Por supuesto, esto no siempre es fácil. Pero al final del juego, vale la pena.
Permitirnos reconocer nuestra sagrada dualidad nos permitirá regresar, paso a paso, a la Unidad.
Poder acceder a nuestra divinidad también significa que debemos aceptar y reconocer nuestros lados oscuros, porque ellos también son parte de nosotros.
La lucha que se está librando en todo el mundo para que las mujeres puedan retomar su lugar como co-creadoras de Vida aún no ha terminado.
Es importante darse cuenta de que esta lucha no se lleva a cabo en el fin del mundo. No, está sucediendo en todas partes, a nuestro alrededor, pero también dentro de nosotros.
No es importante juzgar el comportamiento de ciertos hombres y simplemente mantener el escote en marcha.
Más bien, es necesario abrir nuestro corazón y enviar Amor a las situaciones que lo requieran. Depende de nosotras tomar las decisiones de vida que producirán lo que sucederá a continuación.
Al decirles esto, de ninguna manera soy el alma de una víctima. No quiero morir por mis creencias.
Solo estoy ahí para ayudar a crear conciencia.
¿Por qué tener miedo de volver? Ya no estamos en un período que requiere volver a la oscuridad, estamos en la era del surgimiento de la Luz.
Actuando a nuestro nivel, dejando que el Sagrado Femenino cuide nuestro corazón, seremos capaces de esparcir ondas de amor a nuestro alrededor que llegarán a quienes estén dispuestos a aceptarlo.
Y para terminar…
Nacer del Sagrado Femenino es dar a luz en una misma a la mujer Rosa … Perfecta conjunción de la Mujer Roja, encarnada en la materia, libre de su cuerpo, de su sexualidad, mujer salvaje por excelencia, y de la Blanca, mujer espiritual y celestial, emergencia del Sagrado Masculino etérico.
Mi papel como terapeuta es permitir la re-sacralización de nuestras almas.
Permitir la re-unión de lo sagrado polarizado, para revivir en cada uno de nosotros, el Yin y el Yang.
Que puedan revivir esta maravillosa conjunción en cada uno de ustedes.
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